Sean ustedes bienvenidos a nuestra parroquia de San Antonio de Padua, la cual tiene una influencia geográfica entre las Calles 1ª Sur hasta la 12 Sur y las Carreras 10ª hasta la 24, abarcando los barrios San Antonio, Policarpa, Sevilla, Ciudad Berna, Ciudad Caracas, Santa Catalina y Luna Park. En nuestra comunidad parroquial se encuentran representadas todas las condiciones sociales: desde aquellos que lo tienen materialmente todo hasta los que necesitan más de nuestra ayuda cristiana, pero a pesar de ello es una comunidad unida, fiel al mensaje de Jesucristo y motivada alrededor de las necesidades parroquiales y pastorales que día a día van surgiendo.
Nuestro Templo Parroquial, inicia sus obras pastorales a mediados de la última década del siglo XIX, bajo el amparo de San Antonio de Padua para el cuidado de la niñez más desamparada de la ciudad por iniciativa de Monseñor Manuel María Camargo. Como parte de su misión, monseñor Camargo dispone de unas instalaciones para la educación y residencia de estos niños así como de un templo/capilla para su formación religiosa y la cual queda bajo el cuidado de los Terciario Capuchinos. Finalizando la segunda década del siglo XX queda culminada la construcción del Templo Parroquial y el 18 de agosto de 1948, bajo decreto emitido por el hoy Siervo de Dios Ismael Perdomo Borrero, el Templo de San Antonio de Padua es erigido como Parroquia al servicio de la iglesia de Bogotá, direccionada desde entonces por los frailes Terciarios Capuchinos y luego por sacerdotes de la Arquidiócesis de Bogotá y hasta el día de hoy continúa con su misión al servicio del Reino de Dios para todos aquellos que lo buscan y encuentran en Él consuelo y esperanza.
Dentro de los barrios que componen el accionar pastoral de nuestra parroquia, podemos encontrar un gran número de obras sociales, educativas, económicas y eclesiales que dinamizan desde sus respectivos campos de acción, el obrar de Dios en nuestra comunidad: en el campo de la educación, nuestra parroquia recoge un buen número de instituciones educativas entre colegios privados y oficiales como el Colegio Jaime Pardo Leal, el Gimnasio Monseñor Manuel María Camargo, entre otros; entidades de educación técnica y tecnología, como el SENA y de formación superior como la Fundación Universitaria Monserrate, de propiedad de la Arquidiócesis de Bogotá.
Las obras sociales en nuestra parroquia tienen un valor significativo, encontramos el Hospital Santa Clara, que prioriza su atención a la población más vulnerable de la ciudad y un hogar de paso al servicio de los familiares de aquellos hospitalizados remitidos de otras partes del país, un hogar de asistencia y refugio para los desplazados de los Llanos Orientales, un ancianato a cargo de las hermanas de San Pedro Claver, centros de Bienestar Familiar, comedores comunitarios al servicio de quienes más lo necesitan y programas de apoyo y acompañamiento para el adulto mayor residente en los barrios de la parroquia.
Dada la cercanía de los barrios que componen nuestra parroquia al centro de la ciudad y a los principales centros de comercio, el barrio Policarpa se perfila como uno de los ejes más importantes de la industria textil local y nacional y que cuenta con una asociación de comerciantes muchos de los cuales prestan sus servicios como laicos comprometidos dentro de la parroquia, además en los barrios Sevilla y Ciudad Berna se localizan pequeñas industrias dedicadas a la fabricación de distintos productos en cuero, así como un gran número de pequeños negocios familiares que dinamizan las actividades económicas dentro de la comunidad parroquial. Encontramos también un gran corredor gastronómico en el barrio Luna Park, reconocido por sus pescaderías, las cuales llaman la atención de los residentes de la ciudad.
Contamos con la gran bendición de tener en nuestra comunidad parroquial representaciones eclesiales de diferentes comunidades religiosas de hombres y mujeres que no solo dedican sus esfuerzos a atender las misiones que tiene a cargo en sus hogares e instituciones, sino que también están inmersos en el crecimiento de la actividad parroquial bien sea desde el apoyo en las Eucaristías, como en los procesos de formación de los diferentes grupos pastorales, es así que residen en nuestros barrios miembros de la Compañía de Jesús (Jesuitas), de la comunidad de los Monfortianos (Compañía de María), de los Religiosos Camilos, Hermanas Dominicas de La Presentación, Hermanas de la Comunidad Hijas de la Sabiduría y las Hermanas de los Pobres de San Pedro Claver.